El mundo siempre fue redondo, solo algunos cuadrados no
quisieron verlo así.
¿Cuantas otras cosas en el mundo no serán redondas? y si será
el mundo redondo en realidad?
Los Profesores de las áreas creativas hoy se enorgullecen y se jactan al ver perder a sus alumnos, son felices
derramando UNOS innecesarios, que solo generan la empatia de los estudiantes “perdedores” hacia su materia, hacia el conocimiento, y el gusto de aprender.
El aprender: el pilar de las universidades; cuando
los filósofos griegos se sentaban con sus discípulos a debatir sobre la vida,
nadie estaba en lo cierto o lo incierto, Platón no se burlaba del
(des)conocimiento de sus alumnos, en cambio los escuchaba atento pues ellos podían
tener las respuestas que el estaba buscando; ¿quien dijo, que es el profesor
quien tiene la verdad absoluta?, la historia nos ha enseñado que las verdades absolutas no
existen.
En los colegios se esfuerzan por callar el pensamiento
divergente, pero el real insulto a la razón se da en la universidades, donde
vacas sagradas aborrecen a sus pupilos, mofándose por hacerlos sufrir, en las
carreras de arte y creación se miden los trabajos por el grado de trasnocho,
cansancio y frustración que estos generen en el alumnado, ¿como puede un
profesor no sentirse culpable al frente de un salón lleno de
zombies que no pudieron dormir a
causa del exceso de trabajo innecesario impuesto por el?
La exigencia
tiene un limite, cuando este se cruza, se llega a la inutilidad .
se aprende con el cerebro: para adquirir un conocimiento (
aprehenderlo: poderlo modificar y adaptar) se debe pensar, divagar, observar, tocar, mirar, sentir, oler,
probar... repetir, sin sentido: frases, dibujos, nombres, letras; solo genera
maquinas que al dañarse deben ser desechadas.
“En las empresas tendrán que hacer mil de estos, un millón
de estos, tres billones de estos al día, al mes, al año” es una frase que se
escucha con frecuencia en las aulas de clase; yo no quiero trabajar en una empresa asi, no quiero ser una maquina; yo
quiero ser la mente que crea maquinas, yo no quiero pintar mil papeles al día,
yo quiero ser un artista; quiero pensar, actuar, proponer millones de ideas y ejecutarlas; no quiero ser un UNO, ni un
TRES ni un CINCO, porque si los
seres humanos fueramos números, seriamos el numero Pi un numero tan largo y
complejo que nunca se terminara de descubrir.
Olvidemonos de este pensamiento, dejemos de creer que el profesor es el único que tiene el conocimiento; volvamos a la época en la que la humanidad descubrió la
mayor cantidad de conocimiento en
la historia, la época en la que el filósofo se sentaba con sus discípulos, que
a su vez eran filósofos.
sin notas, ni competencias, ni humillaciones; simplemente un
grupo de personas reunidas en aras del conocimiento... solo así se descubre que
la tierra es, en realidad, ELIPSOIDE.
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